Por qué esta empresa quiere reciclar cuerdas de instrumentos en todo el mundo
Desde la década de 1970, D’Addario ha fabricado cuerdas para guitarras, instrumentos de orquesta y más, con la vista puesta en el futuro. Pero en aquel entonces, nadie en la empresa con sede en Farmingdale, Nueva York, podría haber esperado que ese futuro involucrara la fundición de cuerdas de metal.
Tras décadas dando prioridad a la educación musical de los niños a través de su Fundación D’Addario, sobre todo en comunidades desfavorecidas, la empresa lanzó Playback en 2015, que prioriza la sostenibilidad. El programa reutiliza cuerdas usadas de guitarra y orquestales en colaboración con la empresa de reciclaje TerraCycle. Las cuerdas de metal se funden en nuevas aleaciones, mientras que las de nylon se reciclan para aplicaciones industriales de plástico, evitando que ambas acaben en los vertederos, donde se acumulan más de 1,5 millones de libras (más de 680.000 kilos) de cuerdas al año, según Playback. Para participar, los donantes pueden depositar las cuerdas en contenedores colocados en los casi 1.200 puntos de recolección en todo el país, incluidos cientos de tiendas Guitar Center y minoristas independientes, o enviarlas por correo, siempre que los envíos pesen más de 5 libras (2,2 kilos) para minimizar desperdicios. (D’Addario proporciona etiquetas de envío prepagadas de UPS para dichos donantes).
Hasta la fecha, se han reciclado casi 13 millones de cuerdas a través de Playback. Bandas como U2, My Morning Jacket y Young the Giant han llamado la atención sobre la iniciativa, y este último ha donado un porcentaje de cada entrada vendida en su gira de verano de 2023 a la Fundación D’Addario. Además, la empresa se ha asociado con competidores y su sitio web ofrece enlaces a organizaciones internacionales de reciclaje de cuerdas en Francia y Eslovaquia. “Queremos hacer lo que sea bueno para toda la industria”, afirma Brian Vance, vicepresidente de cuerdas con trastes y accesorios de D’Addario.
En 2022, D’Addario instituyó el World String Change Day (Día Mundial del Cambio de Cuerdas) para aumentar el interés en el programa. La idea anima a los consumidores a probar nuevas cuerdas y otros accesorios, a menudo mediante ofertas. Regresará por tercer año consecutivo el 6 de junio. “En ese momento sacas tus cuerdas, y van directamente al contenedor de Playback”, dice el director de marketing Jonathan Turitz. La Fundación D’Addario también ha liderado campañas para quienes buscan donar instrumentos usados, muchos de los cuales terminan en manos de estudiantes necesitados. La práctica de reparar instrumentos usados para niños se destacó en el reciente documental ganador del Oscar The Last Repair Shop. “Esa película es exactamente la historia de lo que estamos haciendo”, dice Turitz, “ya sean la gente de la tienda o los niños”.
Playback pretende expandirse por todo el mundo en los próximos años, aunque los problemas logísticos y los costos les dificulte esta tarea. “Las leyes, metodologías y prácticas de reciclaje en Europa son muy diferentes a las de Estados Unidos”, explica Vance, aunque este mismo año D’Addario espera realizar pruebas para ampliar el programa al extranjero. Y a pesar de los crecientes costos que conlleva el éxito del programa, la misión de D’Addario sigue siendo prioritaria. “Nos enfrentamos a una crisis existencial”, dice Turitz. “Es vital que pongamos al planeta por encima de las ganancias”.