El Coliseo de Puerto Rico celebra 20 años como recinto vital de la isla
El 13 de septiembre de 2004, Van Halen fue el primer gran acto musical en actuar en el recién inaugurado Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot en San Juan. Ese mismo año, artistas locales e internacionales actuaron en la arena, entre ellos Draco Rosa, Daddy Yankee, Juan Luis Guerra, Andrea Bocelli y Korn.
“No habríamos podido tener esos espectáculos si no tuviéramos El Coliseo”, dice Jorge Pérez, gerente regional de ASM Global, que administra el lugar. “Era la necesidad que teníamos en ese momento en la historia”.
Mariela Vallines, directora ejecutiva de la Autoridad del Distrito de Convenciones de Puerto Rico, que posee el edificio y contrata a ASM para operarlo, señala que en los últimos 20 años el Coliseo “se ha convertido en un centro cultural para la isla, reuniendo a la gente para celebrar música y deportes como anfitrión de eventos y entretenimiento de clase mundial. El lugar ha contribuido significativamente a la economía de Puerto Rico, generando ingresos para los negocios locales y proporcionando oportunidades de empleo en la isla”.
Además, agrega, “ha ayudado a posicionar a Puerto Rico como un destino de entretenimiento premium atrayendo tanto a audiencias locales como internacionales que han superado los 10 millones de visitantes en las últimas dos décadas”.
Antes de la construcción de El Coliseo, la isla caribeña acogía eventos deportivos y de entretenimiento principalmente en dos lugares: el Coliseo Roberto Clemente Walker y el Estadio Hiram Bithorn. Sin embargo, se necesitaba un lugar de alta gama “para ser competitivos en turismo” porque “no podíamos sobrevivir solo con el esparcimiento, los viajes y el turismo regular”, dice Pérez.
Desde su inauguración hace 20 años, “El Choli”, como los lugareños lo llaman coloquialmente, se ha dado a conocer tanto local como internacionalmente y se ha convertido en la “arena de ensueño” definitiva en la que muchos artistas aspiran actuar.
“El primer objetivo de cualquier artista, músico o DJ es tocar en una arena así de grande”, dice el artista puertorriqueño Jay Wheeler, quien hizo su debut en el Choli en 2022 con cuatro shows sold-out. “Es como ganar un Grammy. Todo artista de Puerto Rico siempre tendrá el objetivo de hacer algo en el Coliseo”.
Una ola de artistas urbanos no solo ha recibido un sello de aprobación en el lugar, sino que también ha logrado hitos. Daddy Yankee, con sus espectáculos Con Calma Pal’ Choli de 2019, recaudó 7 millones de dólares, y Wisin y Yandel facturaron 6,2 millones de dólares con su serie de conciertos de 2018, según Billboard Boxscore. Este último acto tiene el récord de más conciertos agotados, con 105.000 boletos vendidos en ocho espectáculos.
El Coliseo ocupó el puesto No. 24 en la lista global Top Venues de fin de año de Billboard en 2023 (en la categoría de capacidad de más de 15.001 personas) y se clasificó en el cuarto lugar en el mercado de recintos en mercados latinos y de habla hispana, después del Centro Kaseya en Miami, el Centro WiZink en Madrid y el Movistar Arena en Santiago de Chile.
Pérez conversó recientemente con Billboard sobre el pasado, el presente y el futuro del recinto.
¿Qué vacío llenó El Coliseo cuando se construyó hace 20 años?
El gobierno notó que había una necesidad de tener una arena de clase mundial. El edificio que teníamos antes era el Coliseo Roberto Clemente Walker, que se inauguró en 1973 y donde se celebraban conciertos y eventos deportivos en las décadas de 1980 y 1990. También tenemos el Estadio Hiram Bithorn construido en 1962. Con eso vino la construcción del Centro de Convenciones, que se inauguró un año después que El Coliseo. Pero la visión era que necesitábamos lugares de clase mundial para ser competitivos en cuanto a turismo.
No podíamos sobrevivir solo con el esparcimiento, los viajes y el turismo regular. Necesitábamos provocar grupos, reuniones, convenciones que generaran movimiento económico. Para complementar eso, el gobierno realmente entendió que necesitábamos un destino de primer nivel. Así que esa es la historia detrás de esto.
Hubo muchas críticas al principio, incluso cuando comenzó la construcción. Pero cuando miramos hacia atrás, fue una decisión muy inteligente, considerando la exposición que Puerto Rico ha tenido en la industria del entretenimiento y cómo ha abierto puertas para nuestros artistas. Cuando miramos hacia atrás, fue una idea visionaria con resultados positivos.
¿Por qué el recinto lleva el nombre del comediante José Miguel Agrelot?
Surgieron muchos nombres e ideas. En enero de 2004, José Miguel Agrelot, que era comediante, presentador de radio y TV, actor, productor y visionario, falleció. Entonces su nombre subió a la cima de la lista y fue aprobado.
Uno de sus personajes de televisión más famosos fue Don Cholito, que interpretó durante el segmento “Encabulla y Vuelve y Tira” en El Show del Medio Día a fines de los años 70 y principios de los 80. “Encabulla y Vuelve y Tira” hacía referencia al enrollamiento de un trompo de madera [o yo-yo] — en otras palabras, hacerlo de nuevo y seguir intentándolo. Eso se convirtió en una analogía de la persistencia y el optimismo de los desafíos diarios que tenían los puertorriqueños en ese momento.
Mientras promocionaba “La Noche de la Revancha”, una de las primeras peleas de boxeo que tuvo lugar en El Coliseo, donde Miguel Cotto ganó el campeonato de peso welter junior, el comentarista deportivo Elliott Castro fue el primero en decir: “Vamos a ver boxeo en El Choliseo”. Desde entonces, todos conocen el edificio por ese apodo, El Choli.
Don Cholito proporcionó optimismo, una sonrisa contagiosa y una personalidad vibrante, y ese personaje trataba precisamente de persistencia y superación de tiempos difíciles. Esas son algunas características y rasgos fuertes que tenemos en Puerto Rico. El espíritu de Don Cholito vive en cada rincón de El Coliseo.
¿Por qué el lugar juega un papel importante en la carrera de un artista puertorriqueño?
Primero, es su ciudad natal. Nos consideramos “La Catedral del Reggaetón”, y para los artistas de ese género especialmente, es importante actuar en El Coliseo porque es como una gran prueba para ellos. Hemos tenido a los mejores actos urbanos aquí. Es un lugar clave, y [marca] un punto en la carrera de cada artista de cuándo actuaron aquí, qué tan bien lo hicieron y cómo eso impacta sus carreras en el futuro.
¿Por qué se ha vuelto importante para los artistas de otros países?
Tienes gente [en Puerto Rico] que ama y realmente aprecia el entretenimiento en vivo y puede identificar un buen show. La energía aquí es increíble. Tenemos una multitud educada y conocedora. Cuando la multitud en El Coliseo te acepta como artista, sabes que estás en camino de hacer cosas buenas. Eso tiene que ver con nuestra cultura, cómo nos criamos, cómo desde muy pequeños estamos escuchando música; sabemos lo que es una producción de primer nivel. Cuando un artista sube al escenario y siente esa energía y aceptación, eso los llena de confianza en que lo que están haciendo y produciendo es especial.
¿Reciben los artistas puertorriqueños preferencia en cuanto a fechas?
No. Administramos nuestro calendario muy responsablemente, y es por orden de llegada. Trabajo directamente con management o agencias o promotores locales para tratar de encontrar las mejores fechas.
¿Cuál diría que ha sido el concierto más complicado a nivel logístico?
Debe ser el World’s Hottest Tour. Bad Bunny quería romper el récord de asistencia, y para hacerlo, pusieron un escenario muy pequeño en el lado sur y pusieron toda la producción [en lo alto]. De un punto de El Coliseo al otro, todo el sonido y la iluminación estaban en [el techo], eso no es normal. Por lo general, nuestros escenarios son grandes, pero querían maximizar el tamaño de la audiencia. He oído que el show de Bad Bunny ahora con el Most Wanted Tour también es muy complejo.
¿Qué impacto económico tiene el recinto en la isla?
La industria del entretenimiento y los eventos es enorme en Puerto Rico y crea 30.000 empleos. Crea 2.000 millones de dólares, y casi 400 millones de dólares de eso van al gobierno en forma de ventas, impuestos y otros ingresos que perciben de las actividades que organizamos en nuestros edificios. Es una gran parte de la economía local.
Consideramos que es una parte importante de nuestro ecosistema económico. Creamos mucho turismo de entretenimiento; la gente viaja desde diferentes partes para ver un espectáculo aquí. Aproximadamente el 15% de los boletos adquiridos en el lugar provienen de un código postal que no está en Puerto Rico. Nuestra visión es seguir promocionando a Puerto Rico como un destino de entretenimiento y turismo de primer nivel. Tenemos una responsabilidad social de ayudar a nuestra comunidad.
En términos de oportunidades comerciales que podemos traer, la exposición que Puerto Rico ha tenido a través de El Coliseo y a través de los artistas que actúan en nuestro escenario ha ayudado a poner al país en el mapa.
¿Cuántas personas trabajan en un evento en el lugar?
En promedio, en un evento con todas las entradas vendidas, desde el personal de eventos hasta la seguridad, la limpieza y la operación, podemos tener cerca de 400 a 500 empleados, sin contar al personal de producción del lado del artista. Tenemos 26 suites corporativas; tenemos nuestras concesiones de alimentos. Con un escenario al fondo del lugar, que es la configuración más común, caben 15.000 personas, y básicamente, ese es el personal promedio que debemos tener para asegurarnos de que todo fluya sin problemas.
El Coliseo ahora también está organizando ceremonias de premios televisadas.
El primero que organizamos fueron los Premios Billboard de la Música Latina en 2010, y reanudamos en 2020 con los Premios Tu Música Urbano. También hemos organizado los Premios Juventud de Univision en 2022 y 2023. Los programas de premios son muy particulares porque toman mucho tiempo. El montaje para uno de estos programas puede ser de siete a 10 días antes del show. Es una producción muy compleja y, en general, ocupa un período de casi dos a tres semanas.
Después del primer programa de premios que organizamos en 2010, buscar y conseguir un período de tres semanas que no estuviera reservado se convirtió en un desafío para nosotros. Pero cuando comenzamos de nuevo, nos dimos cuenta de que era un gran escaparate para el destino. Premios Juventud, por ejemplo, tuvo excelentes ratings y nos expuso a una audiencia internacional.
¿Cómo visualiza El Coliseo dentro de 20 años más?
Ya somos de última generación, pero esperamos tener un Coliseo nuevo y más grande. Aunque mantenemos el lugar en óptimas condiciones, realmente nos enfocamos en mantener este edificio cumpliendo todas las cláusulas de producción y los espectáculos de alta calidad que hemos tenido.
Pero la verdad es que 20 años es mucho tiempo, y creo que en ese período deberíamos estar haciendo la transición a un nuevo Coliseo. Ha habido conversaciones sobre la construcción de un nuevo estadio en Puerto Rico también, pero veo que estamos haciendo la transición para seguir siendo relevantes y seguir produciendo resultados. Esto se diseñó como un estadio deportivo, pero mirando hacia el futuro, pienso en un nuevo edificio con mayor capacidad y que esté más orientado al entretenimiento.
