Muere Quincy Jones, productor de los éxitos más grandes de Michael Jackson, a los 91 años
Quincy Jones, el gigante musical cuya trascendental carrera de siete décadas abarcó múltiples facetas creativas — músico, compositor, productor, director, arreglista, artista, propietario y ejecutivo de un sello discográfico, productor de cine y televisión, editor de revistas y humanitario — falleció. Tenía 91 años.
Según el publicista de Jones, Arnold Robinson, el ganador de 28 premios Grammy (de un récord de 80 nominaciones) y miembro del Salón de la Fama del Rock & Roll murió el domingo (3 de noviembre) por la noche en su casa en el área de Bel Air en Los Ángeles, rodeado de su familia.
“Esta noche, con el corazón pleno pero roto, debemos compartir la noticia del fallecimiento de nuestro padre y hermano Quincy Jones”, dijo la familia en un comunicado. “Y aunque esta es una pérdida increíble para nuestra familia, celebramos la gran vida que vivió y sabemos que nunca habrá otro como él”.
“Él es verdaderamente único y lo extrañaremos mucho; nos reconforta y nos enorgullece inmensamente saber que el amor y la alegría, que eran la esencia de su ser, fueron compartidos con el mundo a través de todo lo que creó. A través de su música y su amor ilimitado, el corazón de Quincy Jones latirá por la eternidad”.
Entre sus sobrevivientes se encuentran sus siete hijos, incluida la actriz Rashida Jones.
“Quincy Jones es el hombre del renacimiento musical por excelencia”, dijo su colega Clive Davis, también una leyenda de la música, a Billboard en 2013. “Quincy es siempre joven, siempre vital, con una imaginación tan grande como el corazón más grande del mundo”.
En una carrera monumental que abarcó más de 70 años, Jones colaboró con una gran cantidad de luminarias musicales, desde sus mentores Count Basie y Clark Terry, hasta Ray Charles, Frank Sinatra y Michael Jackson. Entre sus logros históricos: Jones produjo los álbumes más vendidos de Jackson, Off the Wall, Thriller y Bad; obtuvo los derechos de la novela The Color Purple (El Color Púrpura) y eligió a una joven Oprah Winfrey para la adaptación cinematográfica de Steven Spielberg nominada al Oscar en 1985; y dirigió las históricas sesiones de grabación del sencillo benéfico estelar de 1985 y No. 1 del Billboard Hot 100, “We Are the World”. Al tomar el mando de A&R en Mercury Records en 1961, Jones se convirtió en el primer afroamericano en ocupar el cargo de vicepresidente de un sello importante. Esa afiliación le llevó a producir varios éxitos para Lesley Gore, comenzando con su debut pop de 1963, “It’s My Party”.
Jones rompió la barrera del color nuevamente como el primer compositor negro en recibir reconocimiento por su trabajo cinematográfico. El primer largometraje que Jones musicalizó fue The Pawnbroker (El Prestamista) de Sidney Lumet en 1964. Con el apoyo de Lumet y otros aliados de la industria como Henry Mancini y Sidney Poitier, Jones compuso la música para dos películas históricas estrenadas en 1967: la ganadora del Oscar a la mejor película In the Heat of the Night (En el Calor de la Noche) e In Cold Blood (A Sangre Fría), basado en el bestseller de Truman Capote.
Pasando a la televisión, Jones escribió temas memorables para series como The Bill Cosby Show, Ironside y Sanford and Son. También fue productor ejecutivo de The Fresh Prince of Bel-Air (El príncipe del rap), protagonizada por el rapero y actor debutante Will Smith, y de In the House, protagonizada por LL Cool J.
“Renunciar” era una palabra ajena para Jones, quien sobrevivió dos aneurismas cerebrales en 1974. Después del primero, escribió en su libro de 2008 The Complete Quincy Jones: My Journey & Passions: Photos, Letters, Memories & More from Q’s Personal Collection: “No parecía que lo lograría, así que mis amigos planearon un servicio memorial… Tuvieron el concierto de todos modos”. Con su neurólogo a su lado, asistió al servicio en el Shrine Auditorium de Los Ángeles mientras Richard Pryor, Marvin Gaye, Sarah Vaughan y Sidney Poitier rendían homenaje a su gran talento y legado.
Al recordar su carrera con motivo de su 80 cumpleaños, Jones dijo a Billboard: “Me siento afortunado de haber nacido en una época en la que pude trabajar con todas las personas que dieron forma a la historia de la cultura estadounidense. Es el plan de Dios y solo tienes que abrir tu corazón y aceptar cada parte de él”.
Quincy Delight Jones Jr. nació en Chicago el 14 de marzo de 1933, hijo de Quincy Delight Jones Sr. y Sarah Frances Jones, y creció con su único hermano de sangre, Lloyd. Su madre trabajó en un banco antes de ser admitida en una institución mental por esquizofrenia cuando Quincy era solo un joven; su padre era carpintero y jugaba béisbol semiprofesional.
Su padre se divorció de su madre poco después de que ella fuera internada y se volvió a casar con una mujer llamada Elvera, que tenía tres hijos. La pareja tuvo tres más, formando una familia de ocho hermanos.
“Estábamos en el corazón del gueto negro más grande de Chicago durante la Depresión”, recordó Jones en una entrevista para la Academy of Achievement, “y cada cuadra era caldo de cultivo para todos los gánsteres, blancos y negros, también en Estados Unidos. Así que estábamos rodeados de todo eso”.
En 1943, su padre desarraigó a la familia para mudarse a Bremerton, Washington, y luego a Seattle, donde Quincy Jr. asistió a la Garfield High School y comenzó su pasión por la música al estudiar composición y aprender a tocar la trompeta. Cuando era apenas un adolescente, Jones conoció a un Ray Charles de 16 años — un encuentro capturado en la película biográfica Ray de 2004 protagonizada por Jamie Foxx — quien se convirtió en una gran inspiración, maestro y amigo. Posteriormente trabajarían juntos en numerosos proyectos musicales.
Mientras asistía a la Universidad de Seattle, Jones tocó en la banda universitaria y continuó estudiando música, pero completó solo un semestre antes de transferirse al Berklee College of Music de Boston con una beca. Finalmente dejó Berklee para realizar una gira con Lionel Hampton como trompetista, antes de establecerse como arreglista para algunos de los principales talentos de la época, incluidos Charles, Vaughan, Dinah Washington, Duke Ellington y Gene Krupa.
Como solista, Jones firmó con ABC Paramount Records en 1956 y se mudó a París un año después, cuando se convirtió en director musical del distribuidor francés de Mercury Records, Barclay Records. Además de estudiar composición con Nadia Boulanger, realizó giras por toda Europa trabajando como director musical del show itinerante Free and Easy del compositor Harold Arlen. También formó una banda llamada The Jones Boys compuesta por artistas de jazz de ese espectáculo. Obtuvieron excelentes críticas, pero el dinero escaseaba.
“Teníamos la mejor banda de jazz del planeta y, sin embargo, estábamos literalmente muriéndonos de hambre”, dijo a la revista Musician. “Fue entonces cuando descubrí que existía la música y el negocio de la música. Si iba a sobrevivir, tenía que aprender la diferencia entre los dos”.
Jones comenzó a trabajar con Frank Sinatra en 1958 cuando colaboraron en un espectáculo benéfico para el cual Jones hizo los arreglos. Sinatra, quien apodó a Jones “Q”, lo contrató más tarde como arreglista para su álbum de 1964 It Might as Well Be Swing con la Count Basie Orchestra. Su primer premio Grammy fue en 1964 al mejor arreglo de “I Can’t Stop Loving You” de la Count Basie Orchestra. Jones luego trabajó en el álbum en vivo de 1966 Sinatra at the Sands, que contenía su famoso arreglo de “Fly Me to the Moon” (la primera grabación que el astronauta Buzz Aldrin reprodujo cuando aterrizó en la luna en 1969). Sinatra y Jones también trabajaron juntos en varios programas de televisión y otras grabaciones, lo que resultó en arreglos para conciertos de otros artistas como Billy Eckstine y Peggy Lee.
“Para ese hombre no había grises. Era blanco o negro”, dijo Jones sobre Sinatra en su libro de memorias de 2001 Q: The Autobiography of Quincy Jones. “Si te amaba, no habría nada en el mundo que no haría por ti. Si no le agradabas, culpa tuya. Sé que él también me amaba. En todos los años que trabajamos juntos, nunca tuvimos un contrato, solo un apretón de manos”.
Irving Green, presidente y fundador de Mercury Records, ayudó a Jones a conseguir un puesto de director musical en el sello y, para 1964, había ascendido a vicepresidente, convirtiéndose en el primer afroamericano en lograr ese cargo en un sello importante. Durante su mandato en Mercury, Jones trabajó como compositor de películas, musicalizando la aclamada Pawnbroker de Lumet, lo que lo llevó a dejar Mercury y mudarse a Los Ángeles para dedicarse a más trabajos en el cine.
En 1965, compuso la partitura para la primera película de Sydney Pollack, The Slender Thread (Con la Vida en un Hilo), protagonizada por Poitier. Jones llegó a musicalizar más de 35 películas, incluidas Walk, Don’t Run (Camina, No Corras, 1966), Enter Laughing de Carl Reiner (1967), Bob & Carol & Ted & Alice de Paul Mazursky (1969), The Italian Job (Faena a la Italiana, 1969), Cactus Flower (Flor de Cactus, 1969), They Call Me Mister Tibbs! (Noche Sin Fin, 1970) and The Getaway (La Huída, 1972).
En 1968, Jones se convirtió en el primer afroamericano en recibir dos nominaciones al Oscar en el mismo año. Él y su compañero compositor Bob Russell (los primeros afroamericanos en ser nominados a mejor canción original) fueron honrados por “The Eyes of Love” del drama romántico con Robert Wagner Banning (Cómprame Ese Hombre), y su música original para In Cold Blood (A Sangre Fría) también fue nominada. Las nominaciones al Oscar de Jones incluyen mejor película, música original y canción original por The Color Purple de 1985, que recibió 11 menciones en total.
En 1971, Jones se convirtió en el primer afroamericano en ser nombrado director musical y director de orquesta de los Oscar. Más tarde se desempeñó como productor ejecutivo de los Premios de la Academia en 1996. Su aceptación del Premio Humanitario Jean Hersholt de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas en 1995 marcó otro hito para un afroamericano. Con siete nominaciones al Oscar, empató con el diseñador de sonido Willie D. Burton como el afroamericano con más menciones.
A lo largo del camino, los álbumes en solitario de Jones también generaron elogios de la crítica y el público para el artista multifacético, comenzando con Walking in Space de 1969 e incluyendo Gula Matari, Smackwater Jack, You’ve Got It Bad Girl, Body Heat, Mellow Madness, I Heard That!, Sounds … And Stuff Like That!, The Dude y Back on the Block. Como compositor, su amplio catálogo ha sido sampleado por artistas como el fallecido Tupac Shakur y Kanye West. Una de las canciones de Jones con más licencias es “Soul Bossa Nova” de 1962. La animada pista se utilizó para la Copa del Mundo de 1998 en Francia, la película Take the Money and Run (Robó, Huyó y Lo Pescaron, 1969) de Woody Allen, las cintas de Austin Powers y la serie de televisión Glee.
En 1975, Jones fundó Qwest Productions, a través de la que arregló y produjo álbumes de Sinatra y otras importantes estrellas del pop. Produjo la banda sonora de The Wiz (1978), protagonizada por Jackson y Diana Ross. Poco después, él y el futuro Rey del Pop grabaron una serie de álbumes innovadores que incluyen el éxito de ventas Thriller.
“Creo que es seguro decir que lo que nosotros — Michael Jackson, yo, Rod Temperton, Bruce Swedien, Jerry Hey, Greg Phillinganes y todo el A-Team de mi estudio — hicimos con Off the Wall, Thriller y Bad nunca será igualado”, dijo Jones a Billboard en 2013. “Fue la convergencia perfecta de talento, experiencia y momento oportuno, con suficiente espacio para que Dios caminara por la sala”.
Al fundar Qwest Records en 1980 como una empresa conjunta con Warner Music Group, Jones supervisó un grupo ecléctico de artistas, entre los que se encontraban Sinatra, la banda británica de post-punk New Order, Joy Division, James Ingram, Tevin Campbell, Andraé Crouch, Patti Austin, Siedah Garrett, Gregory Jefferson y Justin Warfield.
Más allá del entretenimiento, el activismo social jugó un papel importante a lo largo de la vida de Jones. Apoyó a Martin Luther King Jr. en la década de 1960, trabajó con el movimiento P.U.S.H. de Jesse Jackson, y se asoció con Bono en una serie de proyectos humanitarios. Fundó una organización llamada The Quincy Jones Listen Up Foundation, dedicada a construir hogares en África y empoderar a los jóvenes a través de programas educativos en música y cultura.
Al centrar su atención en el alivio de la hambruna en 1985, Jones reunió a un grupo diverso de superestrellas de la música en los A&M Studios en Los Ángeles, donde dirigió la sesión de grabación de “We Are the World”, ordenando famosamente a los artistas reunidos a que “dejen el ego en la puerta”. El sencillo benéfico para USA for Africa, ganador del premio Grammy, recaudó más de 63 millones de dólares para aliviar la hambruna en Etiopía.
En 1990, formó Quincy Jones Entertainment en una empresa conjunta con Time Warner. QJE produjo la comedia de NBC Fresh Prince of Bel-Air, que puso al rapero Smith en el mapa como actor, así como In the House de UPN y Mad TV de Fox, entre otras. En 1993, cofundó QDE, Quincy Jones/David Salzman Entertainment. Además de producir películas, programas de televisión y entretenimiento educativo, QDE publicó dos revistas, VIBE y Spin.
Más allá de sus 27 premios Grammy, los numerosos reconocimientos de Jones incluyen los premios Grammy Leyenda Viviente y del Consejo Directivo, y el honor más alto de Francia: Commandeur de la Legion d’Honneur. Incorporado al Salón de la Fama del Rock & Roll en 2013, Jones había producido recientemente el documental de 2014 Keep on Keepin’ On, sobre el trompetista de jazz Clark Terry y su tutoría del prodigio ciego del piano Justin Kauflin.
En sus últimos años, Jones continuó ocupado descubriendo y nutriendo a artistas de la próxima generación, como Kauflin, Nikki Yanofsky, Emily Bear y Alfredo Rodriguez. Actuó en el Concierto por la Paz Mundial en Hiroshima, Japón, en 2013, lanzó proyectos como Dubai Music Week a través de su grupo de artistas internacionales Global Gumbo, creó la aplicación musical Playground Sessions y se asoció con productos de marca, desde auriculares (Harman) hasta relojes (Audemars-Piguet). En 2013, presentó una demanda de 10 millones de dólares contra MJJ Productions, controlada por el Michael Jackson Estate, y Sony Entertainment, alegando que le habían reducido las regalías de lanzamientos póstumos. El juez a cargo dictaminó en febrero de 2016 que el caso pasaría a juicio el 15 de junio.
En el capítulo final de su impactante carrera, Jones anunció en 2023 una importante reestructuración de Quincy Jones Productions y, en última instancia, cerró su división de management de artistas. La decisión marcó un cambio hacia la priorización de esfuerzos creativos en la música, el cine y la tecnología. Mientras se alejaba del manejo de artistas, Jones siguió comprometido a asesorar a jóvenes talentos, celebrar los éxitos de ganadores del Grammy como Jacob Collier y Jon Batiste, y expresar su gratitud por las contribuciones del presidente saliente de la división, Adam Fell. Incluso con estos cambios, Jones continuó apoyando a la próxima generación de artistas hasta su deceso.
Quincy Jones Productions estuvo centrada en una serie dinámica de proyectos en varios medios. Entre ellos se encontraban proyectos cinematográficos, televisivos y teatrales, incluida una adaptación musical de The Color Purple y un show de Broadway sobre la historia de la música negra. Jones también mantuvo asociaciones influyentes, como sus productos de audio Q-Line con Harman International y Qwest TV, una plataforma de streaming dedicada al jazz.
El año pasado, Jones también celebró sus 90 años de vida en un homenaje de dos noches repleto de estrellas en el Hollywood Bowl. La celebración, encabezada por su ahijada Patti Austin y con actuaciones de Stevie Wonder y la estrella emergente del jazz Samara Joy, capturó las siete décadas de carrera de Jones y su legado como artista, productor, arreglista y director. Desde conmovedoras interpretaciones de los clásicos de Jones hasta homenajes de sus colaboradores de toda la vida, el evento subrayó el profundo impacto que tuvo en generaciones de músicos.
Intérpretes, respaldados por miembros principales de la banda de Jones y la Orquesta del Hollywood Bowl, dieron vida al trabajo icónico de Jones, incluidas colaboraciones con Michael Jackson, destacadas por las interpretaciones de “Wanna Be Startin’ Somethin’”, “P.Y.T.” y “Man in the Mirror”. Con actuaciones impactantes como la versión de Jennifer Hudson de “You Don’t Own Me”, también se honraron las contribuciones de Jones como pionero al romper las barreras raciales en la industria.
La velada cerró con Wonder dirigiendo a la banda en “Happy Birthday”, un tributo apropiado a un hombre cuyo trabajo unió a la gente.
Jones estuvo casado con su novia de la secundaria Jeri Caldwell de 1957 a 1966, con la actriz Ulla Andersson de 1967 a 1974, y con la actriz Peggy Lipton de la serie de televisión The Mod Squad (la madre de Rashida) de 1974 a 1990. Le sobreviven siete hijos, incluido uno con la bailarina Carol Reynolds y otro con la actriz Nastassja Kinski.
Con reportería adicional de Gail Mitchell.